¿Te acuerdas del anuncio de subasta que vimos en la tienda de antigüedades?
No te lo vas a creer, pero es que al final no me pude resistir , me perdió la curiosidad y me acabé comprando una cómoda. No me pongas esa cara , ya te lo decía yo, no había casi nadie. La verdad es que me salió bastante barata.
Por la tarde tuve que volver con un carrito de reponedor que me dejó el verdulero, no veas lo que pesaba el mamotreto. Aún sin aliento le quité las envolturas que le habían puesto para que no se escaparan los cajones , intenté abrir y ...... no había manera.
No te rías, ¿ves cómo eres un cínico?, creí que la había roto por que unos cuantos trompicones ya le di al subirla por las escaleras , pero con un poco de maña y un mucho de amor propio al final lo conseguí.
¿Y sabes por qué no abría? Estaba a reventar de negativos.
Dos días de encierro mirando, todo fotos de calle, calculando, así por encima, como 30 o 40.000 . Me he vuelto loco. Tan loco, que bajé a comprar la misma cámara, aquí en Chicago , Central Camera, ¿sabías que lleva abierta más de 100 años?.
Pregunté por el nombre que aparecía escrito a lápiz en los carretes y se acordaban. Bueno, recordaban que era una refugiada judía francesa llegada a Chicago alrededor de los años 50, que no era muy efusiva, que prefería las películas extranjeras a las americanas , que cuidaba a unos niños y que había ido por allí a comprar de vez en cuando. Quise conocerla, pero me dijeron que estaba muy viejita y enferma y lo dejé correr.
Hace unos días leí su esquela en la prensa, decía: una segunda madre de John, Lane y Matthew , y me faltó tiempo para ir a ver quién había hecho el encargo.
Me acerqué a la dirección que me dieron en el periódico. No existe. Y el teléfono tampoco, dice que está fuera de servicio.
No existen.
Tengo 40.000 negativos. En mis manos .
John Maloof le ha hecho un blog a Vivian Maier , que nació en Francia el 1 de Febrero de 1926 y murió en Chicago el 21 de Abril de 2009.
Vivian
lo ojos me voy a dejar ¿lleva Vivian una yashica o una rollei?
ResponderEliminarcarretes no revelados...
Yo tuve la ocasión de revelar una película muy valiosa que tenía más de 50 años... y la fastidié (la emulsión se había echado a perder). Ays, siempre espero que me vuelva a ocurrir, que me encuentre otra de esas películas.
Vi como tiraron también cajas y cajas de negativos que habían pertenecido a mi abuelo. Me metí unas cuantas tiras de negativos a los bolsillos sin poder parar de llorar.
Por ello, a partir de hoy, me comprometo a acoger a todos los negativos desahuciados y huérfanos que busquen asilo.
Corran la voz.
Lady, una rollei(creo, que yo ya no aseguro nada).
ResponderEliminarQué historión, que fotones.La del hombrecangrejo con el gatico me ha encantao
Rollei. No es que yo distinga, que de foto solo se mirar. Pero he buscao por el blog y lo he acabao encontrando.
ResponderEliminarMe gustan muchísimo las fotos de esta mujer, sorprende que nunca las enseñara a nadie con semejante afición, pero la historia de como acaban viendo la luz ya es maravillosa.
Para seguirla en tiempo real, que el blog lo empezó en Mayo de pasado año y la última actualización es de ayer,así que tenemos años para descubrir los tesoros del cuarto oscuro
stupendo.
ResponderEliminarJoplas, que descbrimiento (primero el de Maloof y luego el tuyo hija).
ResponderEliminarHe echado un vistazo por ahí (rapidillo, que a estas horas no tengo puesto del todo el cerebro) y leo:"Maloof investigó durante un tiempo, creyendo que se trataba de una refugiada judía francesa, emigrada tras la II Guerra Mundial, para posteriormente descubrir que no era judía.Lo que descubrió es que era feminista, socialista y que estaba enferma"
Que fotos, que intriga, que emoción tener ese tesoro entre manos...que tóoo
Yo me pongo en la piel de Maloof y se me pone la carne de gallina.
ResponderEliminarCualquiera podría haber comprado el mueble y haber tirado el material. O haberse echado a perder en un almacén o en el vertedero.
Es asombroso que con tan vasta producción esta mujer no hubiera expuesto o publicado (que sepa nuestro amigo a estas alturas, que esto es una historia sin acabar), que hay fotos buenas, buenas.